¿Qué hacer si vemos que nuestro hijo, hermano, nieto, sobrino tiene los indicadores de acoso escolar?
Cuando nos hacemos conscientes de que un ser querido es víctima de un tipo de violencia, es un momento de gran vacío, dolor y rabia por no haberlo visto, culpabilidad por lo que no hemos tenido oportunidad de gestionar a tiempo.
No te culpes, la responsabilidad es de otro (el agresor/a), la escuela también debe poner las herramientas de detección y prevención.
Empecemos por tener en cuenta unas pautas y los pasos que puede ir dando:
1. No actúe con desesperación cuando su hijo / hija, le explique lo que pasa en la escuela. Se puede sentir mal de estar ocasionando una crisis en usted o su familia.
2. Háblelo con calma y expóngale sus dudas, pregúntele sobre los compañeros y la actitud de la escuela, siempre bajo la premisa de no juzgarlo ni criticarlo por no defenderse o ser una víctima.
3. No busques solucionarlo por impulso emocional ( no llegue a la agresión directa o indirecta a los responsables del acoso), ni lo divulgue a todos sus conocidos (puede ser visto como más humillación para su hijo), háblelo con su hijo (fomente su autoestima y capacidad de decisión).
Contacte con la escuela e informe de lo que ahora sabe, solicite entrevista con dirección y con la inspección de educación.
Si el acoso no está relacionado con la escuela, presente una denuncia ante la policía o cuerpos de seguridad de su Comunidad Autónoma.
Busque ayuda de un profesional para devolver, o enseñar, a su hijo las herramientas de protección y autoconfianza.
Con su apoyo y el de los más cercanos su hijo / hija, podrá salir fortalecido de esta situación.
RECUERDA:
Todos de alguna forma u otra estamos implicados en la prevención y denuncia de casos de Acoso Escolar.
En caso de que no obtenga respuestas por la vía educativa, puede recurrir a la demanda civil o penal, según las consecuencias en su hijo o familiar.